Para ver Palma de Mallorca, lo ideal son 3 a 4 días, lo cual permite disfrutar de sus principales atractivos, relajarse en sus playas y descubrir rincones menos turísticos. Puedes comenzar explorando el centro histórico, visitando la Catedral de Palma, el Palacio de la Almudaina y paseando por el casco antiguo. Al día siguiente, dedica tiempo a la playa, como Playa de Palma o Cala Mayor, y aprovecha para probar la gastronomía local. El tercer día, visita el Castillo de Bellver y otros museos o haz una excursión en tren a Sóller, un bonito pueblo cercano. Si decides quedarte un día extra, explora otros lugares de la isla, como Valldemossa o Alcudia, para descubrir más allá de la ciudad.
Si estás planificando un viaje a esta emblemática ciudad, te recomendamos también que le eches un ojo a nuestro otro artículo sobre qué visitar en Palma de Mallorca.
Cuántos días se necesitan para ver Palma de Mallorca
Para ver Palma de Mallorca se necesitan 3 o 4 días (para poder verla en su totalidad y no perderse ninguno de los principales lugares emblemáticos que ver). No obstante, si también quisieras visitar los poblados o playas de alrededor, salir de fiesta o, simplemente, relajarte en la ciudad y disfrutar de sus playas por más tiempo, lo recomendable sería pasar entre 7 y 10 días.
Además, hay una gran cantidad de experiencias que puedes probar, así como eventos, fiestas y celebraciones a las que puedes acudir. Para más información, te recomendamos que visites la web de la fundación de turismo de Palma de Mallorca.
Para ver Palma de Mallorca, se necesitan 3-4 días
Así es, como comentábamos, 3-4 días serán suficientes para visitar y disfrutar los principales lugares emblemáticos de la ciudad y recorrer las calles y barrios más importantes. Con 3 a 4 días podrás disfrutar plenamente de sus encantos, desde su imponente catedral hasta las calas de aguas cristalinas.
A continuación, te proporcionamos un itinerario / planificación de una visita a la ciudad de ejemplo, de 3-4 días de duración:
Día 1: Explora el Corazón Histórico de Palma
Inicia tu aventura en el centro histórico de Palma. Aquí te esperan algunos de los lugares más icónicos de la ciudad:
- Catedral de Palma (La Seu): Este impresionante edificio gótico es un símbolo de la ciudad. Su arquitectura y sus coloridas vidrieras son una experiencia inolvidable. No olvides subir a las terrazas para una vista panorámica de la bahía.
- Palacio de la Almudaina: Justo al lado de la catedral, este palacio real ofrece una mezcla de estilos arquitectónicos, desde el gótico hasta el islámico, con vistas al mar y hermosos jardines.
- Casco Antiguo: Piérdete por las callejuelas estrechas del casco antiguo. En tu paseo, encontrarás edificios históricos, pequeñas plazas, tiendas y cafés que capturan la esencia de Palma.
Termina el día en un restaurante local para probar la gastronomía mallorquina. Las tapas, el “pa amb oli” (pan con aceite) y la “sobrasada” son imperdibles.
Día 2: Relax en la Playa y Sabores Mallorquines
Día de disfrutar de las famosas playas de Palma. Dependiendo de tus gustos, puedes optar por:
- Playa de Palma: Con una extensa franja de arena y muchas opciones de ocio y restauración, esta playa es perfecta para relajarse y disfrutar del sol.
- Cala Mayor: Una pequeña cala de aguas cristalinas, ideal si prefieres un ambiente más tranquilo y una playa menos concurrida.
Después de la playa, aprovecha para degustar los sabores mallorquines en alguno de los mercados gastronómicos de la ciudad, como el Mercado de Santa Catalina, donde puedes probar platos frescos y auténticos.
Día 3: Cultura y Naturaleza
Dedica este día a explorar algunos lugares únicos de Palma y sus alrededores:
- Castillo de Bellver: Este castillo circular, ubicado en una colina, ofrece unas vistas impresionantes de Palma y la bahía. Además, alberga un museo de historia de la ciudad que vale la pena visitar.
- Museos y Galerías: Si te gusta el arte, Palma cuenta con varias galerías y museos interesantes, como el Museo Es Baluard, dedicado al arte contemporáneo.
- Excursión a Sóller: Toma el famoso tren de madera hacia Sóller, un encantador pueblo en la Sierra de Tramuntana. Disfrutarás de un recorrido escénico entre montañas, y al llegar podrás recorrer sus calles, plazas y jardines.
Día 4 (Opcional): Explorando Más Allá de Palma
Si tienes un día extra, aprovecha para conocer algunos de los pueblos y paisajes más bonitos de la isla:
- Valldemossa: Famoso por su belleza y tranquilidad, Valldemossa es conocido por haber sido el refugio del compositor Chopin. Sus calles empedradas y sus casas de piedra te transportarán a otro tiempo.
- Alcudia: Este pueblo amurallado es uno de los más pintorescos de Mallorca. Además de pasear por sus calles medievales, puedes visitar las ruinas romanas de Pollentia, un antiguo asentamiento romano.